Para ello articula medidas en tres niveles. Para empezar, apuesta por agilizar los procesos de estabilización de empleo temporal derivados de las Leyes de Presupuestos de 2017 y 2018, pues se están desarrollando de manera “más lenta de la prevista”, lo que ha provocado “nuevas bolsas de interinidad”.
Por esta razón, el Gobierno ve necesario regular una nueva y última ampliación de los procesos de estabilización, en el que se incluyan las plazas estructurales ocupadas temporal e ininterrumpidamente en los tres años anteriores a 31 de enero de 2020.
Para evitar más demoras en estos procesos, Función Pública exigirá que la publicación de las convocatorias de los procesos selectivos para cubrir plazas aprobadas en los procesos de estabilización, tanto las ya existentes como las que se añadan, se produzcan en todo caso antes del 31 de diciembre de 2021 y que la ejecución de todos los procesos finalice antes del 31 de diciembre de 2024.